Cumpleaños masivo
By laparca
Ya tardaba en escribir y me están presionando porque diga algo de mi cumpleaños. Sí, hace poco que he cumplido años, 29 para ser esactos, y estas son las increíbles peripecias de tal día:
Salía yo del servicio de urgencias del hospital Severo Ochoa justo cuando dieron las 12 de la noche. Está bien eso, empiezo el día con la mano magullada (aún me duele) y, lo peor, es la mano que uso para manejar el movil. Como no, empezó la fiesta de los mensajes (suerte que esa noche solo fueron dos).
La noche tocaba a su fin rápidamente, como siempre que te duermes, y me levante con la mano algo mejor. Por la mañana llegaría mi hermana con su novio desde Cuenca y traerían el primer regalo: un cuerno para tomar cerveza. Como no, lo estrené automáticamente.
Tras la comida partimos rumbo a Calloa donde habíamos quedado con la creme de la creme de Madrid: Riva, Fenix, la reina del hielo, Madhatter, Moriarty, Opit, Enkelas, Helderherim, Sushu, Bender, el Extremeño y Serenae. Los dicho, lo mejor de Madrid, pero aún faltaba gente. En Callao nos encontramos de casualidad con Deviriam, Rana super mala y su hermano, aunque ellos iban por otro lado.
Como aún faltaba gente fuimos a hacer tiempo tomando unas ricas cervezas en un local en Huertas. Poco más tarde se nos unión Aguni y Goblinoide. Ya estábamos prácticamente todos, así que partimos rumbo a tomar nuestra merecida cena. Decidimos ir al Fres&Co. que se encuentra frente a Madrid Comics por ser un lugar amplio y con sitio para todos nosotros.
Por fin llegaron los regalos (prometo que en algún momento habrá fotos). El primero que abrí fue el que abultaba más y… ¡Un sombrero de piel! Debo decir que el sombrero está chulísimo aunque me queda un poco grande. Tengo que ir sin falta a ver si puedo pillar uno un poco más pequeño… si es que tanto programar me ha dejado microcefálico. A parte cayó un libro, un CD con una música que no puedo dejar de escuchar: las series de mi infancia ¡qué de recuerdos! y, como no, una bolsa de chuches (debo decirle a esta gente que prefiero las empanadillas xD).
Al poco llegó Darko y partimos rumbo a Argüelles, que ya hacía bastante que no pasaba por un garito de heavy y siendo mi cumpleaños me permití el lujo de elegir. Por el camino fue dispersándose la gente (Riva, la reina del hielo, Goblinoide, Aguni, Sushu y su novio nos dejaron :’( ).
Con esto pasamos ya a la Dama, donde permanecimos hasta la hora del cierre. Aquí nos encontramos con el Ruso y Merino. Hacía mucho que no veía al Ruso por la universidad, aunque es normal porque luego me enteré que se fue a la UNED.
Y fué pasando el tiempo y nosotros estuvimos escuchando la buena música celestial, que nos deleitaba los oídos, proveniente del mismisimo infierno del metal xD Desgraciadamente las cosas no duran eternamente y la dama cerror por esa noche. ¿Y qué hacemos unos frikis con ganas de fiesta a las 3 de la madrugada? Pues por desgracia esos frikis iban conmigo y a mi me gusta mucho andar… ¡Pobrecitos ellos! Así que rumbo San Bernardo, Bilbao, Alonso Martínez, Gran Vía, Huertas para desembocar en San Ginés.
Núnca había estado en San Ginés y debo decir que los churros que tienes son increíblemente mejores que los de Valor (aunque siguen siendo de 3ª regional). El chocolate no era explendido, pero no estaba mal. Como se nota que era justo la hora, porque estaba hasta los topes, pero conseguimos hacernos un huequito.
Ya tocaba poner punto y final a la noche y separarnos hasta otro momento. A las 8 llegué a mi casa y a en la camá me metí, descansar debia que la exposición de Star Wars por la tarde vería. Tocó levantarse a las 13h, ducha, comida, un poco de tertulia familiar y rumbo a plaza de Castilla.
Vimos robots, vainas, estrellas de la muerte y soldados imperiales, de ahí a cenar y a despedirnos que se nos hacía tarde y la gente tiene que trabajar el lunes. Pobre Helderherim, que es quien llevaba la peor parte, de vuelta a su casa, 4 horas de bus, partiendo a la 1 creo que poco iba a descansar.
Así terminó el cumpleaños (la parte troncal), porque durante esta semana aún han habido (y quedan) algunas cosas.